La Muralla urbana de Osuna se encuentra en el municipio del mismo nombre, en el cuadrante suroriental de la provincia de Sevilla, formando parte de la comarca de la Campiña y de las primeras estribaciones de la Sierra Sur.
Hace ya 3.000 años los íberos fundaron la ciudad de Urso, nombre que hacía referencia a la abundancia de osos en la zona.
Durante la República romana, los partidarios de Pompeyo construyeron fortificaciones sobre el primitivo poblado íbero para defenderse de las tropas de César. Triunfante éste, se fundó una nueva colonia algo más al sur, abandonando el viejo asentamiento íbero e iniciando el proceso histórico de continuo desplazamiento por la falda de la colina hacia las tierras llanas meridionales. Genitiva Julia, que así fue llamada la población, alcanzó un gran esplendor urbanístico, cultural y militar.
Los musulmanes se asentaron en el cuadrante suroccidental de la colonia romana, dándole el nombre de Oxona.
En 1239 fue conquistada por los ejércitos castellanos de Fernando III el Santo. En 1264 fue entregada a la Orden de Calatrava, que creó la Encomienda de Osuna. Por su situación estratégica se convirtió en un punto crucial para la defensa de la línea fronteriza con el reino nazarí de Granada. En el siglo XV los caballeros calatravos cedieron la ciudad de Osuna a don Pedro Téllez de Girón, cuyos descendientes reciben el título de Duques de Osuna durante el reinado de Felipe II.
La ciudad medieval cristiana estaba amurallada y contaba con cuatro puertas: la puerta del Agua o de Teba hacia occidente, la puerta de Granada hacia el norte, la puerta de los Caños hacia el sur, y la puerta Nueva hacia el este.
Más información en el Ayuntamiento de Osuna, Plaza Mayor s/n, teléfonos 95 481 00 50 y 95 481 00 54.
Bien protegido por la declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 sobre la protección de los castillos españoles (BOE núm. 125, de 5 de mayo de 1949) y por la Ley 16/1985, de 25 de junio, de Patrimonio Histórico Español (BOE núm. 155, de 29 de junio de 1985).
MonumentalNet agradece la colaboración de Luis Puey Vílchez